La dirigencia que encabeza desde su lugar de máxima autoridad en las decisiones futbolísticas Juan Román Riquelme no para de darse tiros en los pies.

Más allá de la campaña orquestada por el macrismo desde los medios hegemónicos -con ESPN a la cabeza- para volver al poder en Boca, muchas veces el Consejo de Fútbol se hace los goles en contra.

Por eso, Martín Arévalo, un ariete contra la actual dirigencia, se apoya en decisiones inentendibles -como el manejo de la renovación del contrato con Agustín Rossi y la incorporación de Chiquito Romero- para pegarle.