Lanús cayó 0-1 en Porto Alegre ante el Gremio brasileño, en el partido de ida de la final de la Copa Libertadores de América, en una serie que quedó abierta y que se definirá la semana que viene en el sur del Conurbano bonaerense.

El conjunto de Jorge Almirón hizo un gran primer tiempo, pero fue atropellado en el complemento por su rival, que se puso en ventaja recién a 10 minutos del cierre con el tanto de Cícero, tras una floja resistencia del arquero Andrada.

El arbitraje de Julio Bascuñán fue flojísimo en líneas generales, pero la gran polémica estuvo en el final. Todo Gremio pidió penal en la última jugada del encuentro, la cual no fue revisada por el VAR, e incluso el chileno decidió dar por terminado el partido.