En un fuerte cruce, entre el periodista Diego Brancatelli y el funcionario del PRO Cristian Ritondo, discutieron sobre las masivas clausuras de centros culturales en la ciudad de Buenos Aires. Y el político demostró que su capacidad argumentativa es nula.

Brancatelli preguntó: ¿Por qué están cerrando tantos centros culturales?. Hay una persecusión ideológica cultural inédita en la historia argentina". A lo que Ritondo contestó que estaba trabajando con Juan Cabandié y  el bloque del Frente para la Victoria para "la normalización de los centros culturales porque están fuera de regla".

Rápidamente Brancatelli le espetó si normalización "¿es clausura, cierre?". Dejando en evidencia que el proceso que está llevando a cabo el PRO no contempla las diferencias que suelen darse en la infraestructura de un centro cultural autogestionado y un teatro comercial, por ejemplo.

Pero el momento más llamativo fue cuando Ritondo intentó justificar las clausuras remarcando: "Un centro cultural no tiene un restaurante, una sala de teatro, un complejo y un cuadro de Néstor y Cristina".

Ante el asombro de todos, Brancatelli fue lapidario: "Está todo dicho, le molesta un cuadro de Cristina y Néstor y por eso los cierra".