El eclipse parcial o "anular" tendrá lugar debido a que la Luna estará cerca de su mayor distancia de nuestro planeta, con lo cual se hará demasiado pequeña para cubrir la inmensidad del Sol por completo. El resultado de este fenómeno producirá el efecto de una especie de aro de fuego alrededor de la silueta de la Luna.

Sin embargo, este no se verá desde todo el mundo. De hecho, el único lugar desde el cual será visible en todo su esplendor será una pequeña zona deshabitada en la Antártida llamada Tierra de Wilkes.

En algunas otras partes del mundo, por ejemplo en Indonesia y toda Australia, se podrán observar las fases parciales del eclipse, siendo los mejores lugares para ello Tasmania y la parte norte de la isla australiana.

Debido a que el Sol no estará en ningún momento totalmente cubierto por la Luna, el eclipse puede ser dañino para los ojos, con lo que se recomienda utilizar un cristal con filtro adecuado o unas gafas profesionales.