Los tres jóvenes investigadores en inteligencia artificial y robótica conformaron hace más dos años Replikat, empresa que se dedica a la fabricación de impresoras 3D que presentan múltiples posibilidades.

Se trata de una herramienta con un amplísimo espectro de utilidad y un sinfín de oportunidades económicas, tanto por su practicidad, funcionalidad, bajos costos y adaptabilidad a todos los ámbitos.

Estas impresoras permiten copiar desde un objeto cotidiano a elementos sofisticados de diseño de cualquier industria.

"Lo que hace es tomar un archivo de instrucciones con las coordenadas para construir el objeto", explicó Scaine a la agencia Télam, precisando que "ese archivo hace un modelo en tres dimensiones analizado por el software de la máquina, que a su vez prepara las instrucciones para que se mueva".

Señaló que "los modelos a producir los puede diseñar uno mismo o tomar de internet, o desarrollarlos a través de un escáner 3D, donde se pone el objeto y se lo devuelve en un archivo de tres dimensiones en la computadora"

Los investigadores presentaron su plan de negocios ante el Ministerio de Industria de la Nación, que les dio un aporte de capital para comprar las primeras máquinas para generar piezas de calidad. También participaron en Tecnópolis, donde se contactaron con mucha gente y eso les permitió orientar el desarrollo de sus máquinas.