Fuentes judiciales informaron que el desplazado jefe de la Aduana, Juan José Gómez Centurión, fue quien dio el dato al presentarse en los tribunales federales para hacer una declaración en la causa que instruye la jueza María Servini para investigar el tráfico de efedrina y el triple crimen de General Rodríguez.

Cuando el juez Luis Rodríguez, en reemplazo de Servini (quien está de licencia), ordenó abrir los doce contenedores, los investigadores encontraron diez tanques que, de acuerdo a los reactivos, contenían 25 kilos de pseudoefedrina cada uno.

Las fuentes señalaron a la agencia DyN que era mercadería que estaba por ingresar a la Argentina y destacaron que en el procedimiento estuvieron efectivos de la Policía Metropolitana, empleados del juzgado de Servini y de la fiscalía de Juan Pedro Zoni.