El caso de Melina convulsionó al país por completo. Con notas que la estigmatizaban por ser runa chica humilde y bajadas de línea polémicas, el asesinato a golpes de esta menor de 17 años reveló lugares comunes un poco peligrosos para las mujeres y los medios fueron grandes partícipes de estas conclusiones. Pero Doman, el nuevo caballito de batalla de Canal 13, cree que es al revés, que los medios son los héroes.

Ileana Arduino, abogada con experiencia en políticas de género, se refirió al tema en la revista web Anfibia, y sostuvo contundente que "el caso Melina es la consecuencia de modos de relación dominante: vivimos en sociedades que enseñan a las niñas a no ser violadas en lugar de enseñar a los varones a no ser violadores".

"Asistimos por estos días al discurso que se concentró en la víctima con oscilaciones más o menos explícitas hacia otra mujer, su madre. La condición policial del padre, que atendiendo el lugar de los hechos y la tradición de crímenes mafiosos que atraviesa a la institución que integra podría habilitar las más diversas especulaciones, fue puesto en la escena mediática al solo efecto de reforzar cuán desobediente, cuán desafiante ha sido esa niña y sus opciones de vida", desglosó.

"A pocos días de sus desaparición, Melina empezó a ocupar la escena bajo una serie de expresiones negativas, muy en línea con esa operación ideológica que reduce la biografía de los y las jóvenes pobres a ser definidos por la carencia, los “Ni Ni”. Ella ni estudiaba, ni trabajaba, ni era una buena niña, por lo tanto no es hoy una buena víctima", dictaminó.

En este pequeño video Diario Registrado te muestra cómo y por qué, la línea editorial de Clarín, le echó la culpa desde que comenzó a ser agenda, a la víctima por haber sido asesinada. Cabe destacar que, a los pocos días de que se comenzó a buscar a Melina Romero, una nota del diario del multimedio fue repudiada por su título y contenido.

La misma indicaba que, como a la víctima le gustaba salir a bailar y no había terminado el secundario, su final estaba escrito. En ese discurso, frases como "algo habrá hecho", o "ella lo buscó", sitúan a Melina en el lugar de culpable y no de víctima de un asesinato.

Entonces, Fabián Doman, volvamos a foja cero y a la hora de comunicar hagámoslo con un poco de responsabilidad.