El Gobierno de Macri ratificó su rechazo a la reapertura de las negociaciones paritarias como reclaman los gremios, en un contexto donde la inflación aún es alta y el pregonado mejoramiento de la economía por parte de la Casa Rosada aún no es visible.

El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, calificó de "apresurados" a las demandas de algunos dirigentes sindicales para que haya una recomposición salarial tras la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores producto de la inflación, los aumentos de tarifas en los servicios públicos y el aumento de la canasta básica.

En declaraciones a radio Continental, el ministro dijo que "Esos dirigentes sindicales saben que en los últimos tres meses consistentemente fue bajando la inflación y que creemos que en los próximos meses va a seguir bajando". Además consideró que las subas de haberes conseguidas en el marco de esas discusiones están acorde con la proyección inflacionaria "hacia la baja", estimada por las autoridades.

Asimismo, dijo que "los dirigentes sindicales que han firmado las paritarias -y ya llevamos el 90 por ciento firmadas-, consideran que esos son los montos con los cuales recomponen el poder adquisitivo de los trabajadores, y los empresarios creen que ese es el monto que pueden pagar".