Los recién nacidos son los seres más puros, ya que no tienen la posibilidad de comprender e interpretar lo que pasa a su alrededor. Salvo alguna excepción.

Esta niña de apenas diez meses de vida, reacciona con lágrimas y alegría cuando su madre le canta su canción favorita.

Advertencia. No vea las imágenes sin un pañuelo o papel para secarse las lágrimas a mano.