Padres y docentes de escuelas públicas porteñas acompañados por legisladores y organizaciones políticas y sociales denunciaron frente al ministerio de educación porteño que "17.000 chicos corren riesgo de no comenzar las clases", debido al sistema de inscripción online implementado este año por el gobierno de la Ciudad.

Eduardo López, titular de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), aseguró que "17.000 chicos corren riesgo de no comenzar las clases porque el gobierno porteño no garantiza la educación pública para las familias que eligen esa opción".

"Les dicen a los padres que los escriban a sus hijos en escuelas privadas del barrio", denuncio López frente a un nutrido grupo de padres que se concentró en Paseo Colon 255, sede de la cartera educativa para reclamar por los 17.615 niños que aun no tienen vacantes en escuelas públicas.

Padres y docentes estuvieron acompañados por un importante grupo de organizaciones sociales y políticas y legisladores que apoyan el reclamo de la comunidad educativa.

Como se recordará, ante esta grave situación ya se pidió la intervención de la Corte Suprema de Justicia para que garantice las vacantes en las escuelas porteñas.

Palabra PRO

El gobierno de la ciudad admitió en una audiencia judicial realizada tras un amparo colectivo que recibió 69.000 formularios de inscripción y que dio respuesta a 52.000, por lo que existen 17.000 alumnos con problemas de vacantes en la educación pública, cuando el déficit crónico en este sentido en la Ciudad es entre 5 y 6 alumnos.

Para ello, tras admitir los errores, se comprometió ante el juez en lo contencioso administrativo Eduardo Otheguy a dar una respuesta positiva a los padres para lo cual dispuso 15 escuelas donde realizar los reclamos.

Mario Kestelboim, defensor de la Ciudad de Buenos Aires, organismo que presentó el amparo junto con la UTE, dijo que "lo que sucedió es que el gobierno porteño se dio cuenta ahora que este sistema por internet no tuvo en cuenta las prioridades para dar vacantes que establece el Reglamento Escolar".

"Por esta razón intentan solucionar estos inconvenientes quitando vacantes a los que ya la tenían asignada, pero esto es como una frazada corta, y por ello salen de apuro a comprar aulas móviles", dijo Kestelboim.