Parece obra de extraterrestres, pero no, es el talento de un argentino fanático de Messi.

El ingeniero agrónomo Carlos Faricelli contó cómo es que diseñó la plantilla para que las cosechadoras planten semillas de manera tal que, “si el clima acompaña” puede emerger el rostro de Lionel Messi entre los cultivos. 

“Hoy podemos diseñar un archivo y pedirle a la cosechadora que siembre metro a metro como queremos. Entre los primeros cuatro productores que lo sembraron pasó un tiempo porque la cara no se veía. Pero a los tres días apareció la primera cara y entró a las noticias de todo el mundo”, contó Faricelli. 

En diálogo con América el ingeniero dijo que “la historia termina siendo épica porque tuvimos la Copa, no tanto en el cultivo porque tuvimos una crisis muy grande”.