El hijo de Jorge Julio López recibió en su nombre el doctorado honoris causa que la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) otorgó al albañil dos veces desaparecido, la segunda hace un década.

El doctorado honorífico le fue concecido por su "valentía y entereza" como testigo víctima de la última dictadura cívico-militar. Como se recordará, López desapareció por segunda vez tras declarar ante la Justicia contra el represor Miguel Etchecolatz.

Rubén López, hijo del desaparecido, agradeció el reconocimiento y sostuvo que "este doctorado que le entrega hoy la Universidad a mi viejo se lo dio la calle y su convicción de testificar y contar lo que vio y lo que sufrió, su compromiso con sus compañeros de militancia" y cautiverio.

"Acepto también esta distinción en nombre de los sobrevivientes, aquellos que fueron a declarara a pesar del miedo y en especial aquellos que declararon a partir del 2006, luego de que a mi viejo lo desaparecieron", expresó.

Rubén denunció que su padre "no está porque no se lo protegió, no se le brindó la protección necesaria como testigo", añadiendo que "la democracia tiene muchas deudas y la de mi padre es una de ellas".

"Mi viejo esperó 30 años para que estos juicios se lleven a cabo, así que yo voy a esperar porque sé que la historia va a juzgar a aquellos que no lo protegieron, y quizás sean mis nietos, mis sobrinos, los que algún día recuerden que la familia (López) tenía razón: a López no lo cuidaron", subrayó Rubén.

Además reiteró su compromiso de "seguir reclamando y pidiendo justicia" por su padre y su lucha para que los genocidas "cumplan su condena en cárceles comunes y no en prisiones VIP".

Por su parte, el presidente de la UNLP, Raúl Perdomo, dijo que la distinción otorgada implica "una reparación" y recordó a López como "un luchador que sufrió de manera atroz la dictadura" a pesar de lo cual "con valentía y entereza" revivió el sufrimiento y fue "actor fundamental" en el juicio que condenó a prisión "a uno de los más grandes responsables del genocidio en La Plata".