Eduardo Epszteyn, auditor general de la Ciudad de Buenos Aires, aseguró que la empresa multinacional Iron Mountain "fue por lo menos contratada en dos oportunidades" por el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires: "No es una empresa desconocida, es contratista del gobierno", afirmó.

También señaló que "fue de las primeras empresas que se inscribieron para ser beneficiada por el distrito tecnológico de Parque Patricios" y afirmó que IRM tiene "mucha relación con el gobierno de la Ciudad", que habilitó la planta siniestrada el miércoles.

Según los últimos informes de la Auditoría con respecto a la Dirección General de Fiscalización y Control (DGFyC), "la cantidad de personal es escasa" para garantizar las inspecciones y "falta comunicación" con Habilitaciones y otras áreas para que sean efectivas.