Según estiman los operadores inmobiliarios, este 2017 acumularán incrementos de entre 25 y 30% en la ciudad de Buenos Aires.

Según el diario La Nación, los propietarios buscan recuperar así la rentabilidad perdida en 2016, cuando en promedio la suba del mercado se ubicó en 36,7%, según los datos interanuales a noviembre de la consultora Reporte Inmobiliario, aunque en el caso puntual de los departamentos más chicos (dos ambientes) el alza fue del 27,5%. Los de tres ambientes subieron 44,6%.

Según la Dirección de Estadística de la Ciudad, la inflación en territorio porteño cerró en 2016 en el 41% y, debido a esta licuación de la rentabilidad para las unidades más chicas, algunos propietarios buscan recuperar esos puntos perdidos.

Para renovar contratos los aumentos van hasta el 40%, pese a que las proyecciones en la suba del costo de vida para este año se ubican por debajo de esta cifra.

"Los alquileres aumentaron estos años de forma más acelerada que la inflación debido a la falta de crédito para el inquilino y a que el propietario sigue sin recuperar su inversión, con bajas rentabilidades debido a la fuerte carga impositiva y los altos costos de mantenimiento de un departamento", explicó Germán Gómez Picasso, director de Reporte Inmobiliario.

Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, afirmó que la rentabilidad neta para los propietarios es de un 2,5 o un 3% anual. "Estamos con una de las rentabilidades más bajas de la historia", explicó.