Los vecinos del hospital denunciaron la existencia de la fiesta por el alto volumen de la música. 15 personas entre enfermeros y médicos fueron separados preventivamente de sus cargos por la realización de esta fiesta clandestina.

Alejandro Saied director del nosocomio calificó de lamentable es suceso porque empaña el arduo trabajo del personal de salud.

Los implicados trataron de justificarse asegurando que sólo estaban cenando y que subieron un poco la música.

Lo cierto es que a la primera advertencia no depusieron la actitud y ese momento podría costarle los cargos.