La decisión de los jueces Mariana Maldonado, Pablo Lucero y Claudio Cheminade, de ordenar la detención de Julio César Grassi y su traslado al penal de Ituzaingó, donde deberá cumplir la pena de 15 de prisión por abuso sexual y corrupción de menores, encontró eco entre el fiscal de la causa y los abogados querellantes.

El fiscal Alejandro Varela, a cargo de la causa, celebró la resolución del Tribunal Oral Criminal 1 de Morón porque así se rompió la "sensación de impunidad" que rodeaba a la causa. "Ayer rompimos la sensación de impunidad que reinaba en la sociedad", afirmó Varela.

"Acá hay una ingeniería defensista nunca vista por mí en una causa, y un poder económico detrás que sustenta todos esos gastos", dijo Varela, considerando que "había una mesa chica de complicidad, un circuito muy cercano, que indagué y traté de establecer, pero no pudimos dar con nada. No pude tener una puntita para seguir".

El abogado querellante Sergio Piris, cuyo defendido "Gabriel" es el único de los tres denunciantes por el que Grassi fue condenado (los otros dos son conocidos como "Luis" y "Ezequiel"), dijo que está "conforme" con la resolución de los jueces de Morón porque la situación de libertad de la que gozaba el cura "era un privilegio".

Para Piris, "en este proceso que comenzó en el 2002 se tuvo poco en cuenta a las víctimas. Se lo contuvo más al imputado que a los jóvenes denunciantes", añadiendo que "este es el fin de un capítulo negro para las víctimas, que mientras estaban en esta situación, veían a Grassi pasearse por los programas de televisión gozando de libertad".

En tanto, el abogado querellante Juan Pablo Gallego dijo que a partir de la decisión del tribunal moronense "los niños podrán estar en paz. De una vez por todas aparecieron la garantías de las víctimas".

"Este sujeto por fin va a cumplir la pena que le corresponde por los delitos que ha cometido", destacó el letrado que representa a los derechos de los niños a través de Comité Argentino de Seguimiento y Aplicación de la Convención Internacional de los Derechos del Niños (Casacidn).

En tanto, otro de los abogados querellantes, Jorge Calcagno, dijo que la detención de Grassi "es un paso muy importante" y que aunque la defensa apele la sentencia "el acusado deberá esperar en prisión".

"La legislación le permite a Grassi realizar otra apelación en instancia de la Corte Nacional; pero mientras la Corte decide si admite o no el caso el imputado deberá seguir preso, por eso era tan importante que se resolviera la detención en el día de hoy", sostuvo.