En muchos hogares de Tucumán se ha visto una botella de agua sobre el medidor de luz. Así como se ponía en los canteros con la idea de que evitaba que los perros orinaran, ahora está el mito de que la botella de agua reduce el consumo de energía. 

¿Esto sirve en realidad? ¿Es solo superstición o un mito urbano? Las primeras localidades donde se vio esta tendencia fue La Florida y Delfín, ambas de la capital provincial. 

Según los vecinos, esto reduce el consumo y varios lo comentaron a los medios locales. Por ejemplo, Norma, una habitante local, quien dijo a La Gaceta: "Desde que puse la botella me llegaron $1.000 menos". 

Las reveladoras confesiones fueron comparadas con la opinión de un ingeniero eléctrico de la Universidad de Tucumán, Ricardo Díaz, quien expresó: "Es físcamente imposible que una botella de agua sobre el medidor pueda disminuir el consumo”.

Pero, como decían nuestras abuelas, las brujas no existen "pero que las hay las hay", y en materia de creencias, todo es posible. 

A pesar que a los especialistas les parezca "insólito", tal como expresó el director del Instituto de Alta Tensión y Energía de la UNT, los vecinos afirman que sirve y cada vez más se suman a esta tendencia. 

Claramente, la gente hace cualquier cosa en épocas de crisis.