En la ciudad capital de la provincia de Buenos Aires hay muchas familias que lo han perdido todo por la gran cantidad de agua caída.

Pero más allá de lo perdido, lo cierto es que también se han dividido algunas familias ya que una parte va a un centro de evacuados a conseguir ropa seca y algo de comida mientras otros integrantes de las familias se quedan en las casas para prevenir posibles robos.

Pero lo peor está aún por venir ya que el momento de regresar a una casa que se inundó y descubrir que la mayoría de sus pertenencias fueron arruinadas por el agua y el barro.