La protesta de este miércoles fue convocada por el Centro de Industriales Panaderos del Oeste (CIPOD) y se realizó frente al Congreso, en rechazo a los nuevos aumentos de la harina, que harían que el precio del pan podría dispararse hasta los 80 o 90 pesos. 

Según informaron desde CIPOD, La bolsa de 50 kilos costaba 250 pesos a fines de febrero y en la actualidad los molinos la comercializan a 720 pesos.

En la Capital Federal y gran parte del conurbano bonaerense el precio del pan se encuentra en los 60 pesos promedio, pero en el interior puede llegar a costar 80 pesos.

Ante este panorama, los industriales pretenden ser recibidos por autoridades del Gobierno, para reclamarles que se regule el precio de la harina. 

Hasta 2016, las retenciones a las exportaciones de trigo permitían controlar el precio interno de la harina, pero desde hace dos años el mercado está desregulado y los productores venden ese insumo en el país al mismo precio que al exterior.

La suba del precio de la harina es consecuencia del acelerado incremento en el valor del trigo que la industria molinera le compra a los productores.

En este marco, el ministro de Agroindustria de la provincia de Buenos Aires, Leonardo Sarquís, cuestionó la protesta de los panaderos. "No estoy de acuerdo con que se regale pan como modo de protesta. El problema es la ilegalidad, hay panaderías ilegales en la provincia de Buenos Aires", se quejó el funcionario, en declaraciones radiales formuladas este miércoles.

Para el ministro provincial, "uno ve que protestan y no por una razón. No es sólo el precio de la harina, lo importante es ver si están perjudicando a los panaderos".

"Algo hace ruido y como Gobierno provincial me reúno para ver qué podemos hacer. El trigo subió en los últimos meses lo que no subió en un año", enfatizó.

Fuente: Ámbito