El gobierno porteño recibió 69.000 solicitudes de inscripción on line de las cuales dio respuesta a 52.000, por lo que quedarían 17.000 alumnos sin vacantes garantizadas pero sólo recibió 4.800 reclamos de padres y al día de hoy había dado una respuesta favorable a 4.100 casos.

El defensor general de la Ciudad Mario Kestelboim una de los querellantes en el amparo dijo que "el problema es donde están las otras 12.000 inscripciones a las que no se le asignó vacantes y que tampoco los padres efectuaron ningún reclamo". "Creemos que esos padres al necesitar resolver la escolaridad de sus hijos y ante la proximidad de las vacaciones optaron por anotarlos en escuelas de gestión privada".

"El despropósito de este sistema on line llega a que hay 34 escuelas que no tienen ningún alumno inscripto frente a otras que tienen aulas abarrotadas", aseguró el defensor de la Ciudad.

El gobierno porteño alegó que existen sólo 63.000 vacantes en las escuelas y que ya resolvió el 82% de las solicitudes presentadas  al tiempo que admitió la existencia de "listas de espera para un procedimiento de reasignación si se producen vacantes".

El juez Otheguy escuchó en la audiencia a dos funcionarios del Ministerio de Educación porteño, y a tres padres que ingresaron al recinto judicial, además de representantes de la UTE y la Defensoría.

"El juez nos dijo que tras esta audiencia iba a iniciar una serie de intimaciones como resultado de lo que pudo acreditarse en la audiencia. La Defensoría y el sindicato insistirán para que haya una vacante por cada inscripto, que se respete el reglamento escolar, que no se cierren grados y que no haya aulas abarrotadas de alumnos".