A través del decreto 2/2014, el Ejecutivo dispuso que los rodados, cuyo valor de venta libre de impuestos vaya de 28 mil a 50 mil pesos, sean gravados con una tasa del 30%, mientras que los que superen los 50 mil pesos, deberán pagar una tasa del 50% como estaba previsto.

Según se había estimado anteriormente, las motos debían abonar un impuesto del 50% cuando su valor (sin considerar impuestos) era superior a 22 mil pesos.

El proyecto, ahora modificado, había sido convertido en ley el 18 de diciembre último y obtuvo 39 votos a favor de parte del Frente para la Victoria y de sus aliados, 18 en contra de la oposición y cinco abstenciones del interbloque FAP-UNEN.

Desde la Cámara de Fabricantes de Motovehículos (CAFAM), festejaron la medida y señalaron que "protege a las motos de 250 cilindradas para abajo ya sean de primeras, segundas o terceras marcas".

"Estábamos confiados en que esto sucediera porque pedíamos un mínimo más alto y hoy salió publicado que la base pasó de 22 mil a 28 mil pesos. Pedíamos que fuera 30 mil pero 28 no está tan mal", expresó el presidente de la entidad, Lino Stefanuto.

Stefanuto recordó su reunión con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quien se había comprometido a tratar el tema con los funcionarios de la cartera de Economía.