Sergio Massa está calentando motores y demostrando que es un candidato habilísimo y super complicado para Juntos por el Cambio, que ya se veía cómodo ganador y ahora ve que enfrente le pusieron un rival de un tamaño mayor al que esperaban.

Con su característico manejo de los tiempos, usando las inflexiones de la voz para crear climas, y su indudable carisma para cautivar a propios y ajenos, el ministro de Economía ya mostró las garras y será difícil que no aproveche los resquicios que le dejen para golpear.

Un alerta a la oposición, hay un candidato que no pierde el tiempo y está dispuesto a aprovechar cualquier error que cometan para capitalizarlo a su favor.