En el marco lanzamiento del Plan Nacional de Juventud donde inauguró la primera sede en el barrio porteño de Villa Devoto, Mauricio Macri apareció en público luego del masivo cacerolazo del jueves por la noche en reclamo por los fuertes aumentos de los servicios. El jefe de Estado eligió no hacer ninguna referencia al tema y dio un lavado discurso en el que dijo que la tarea del gobierno es "estar cerca".

"El desafío que tenemos como gobierno es estar cerca para que el Estado esté presente, por eso soñamos con una Casa del Futuro en cada provincia", destacó el mandatario.

Macri tampoco dio explicaciones por el encuentro de dirigentes de la juventud en Casa Rosada del que participó Bandera Vecinal, el partido neonazi de Carlos Biodoni. 

El acto cerró con una pregunta sobre si los presentes quieren ser felices y cánticos de sí se puede, a modo de arenga.