El escrito, que fue entregado por sus abogados, Daniel Rubinovich y Rafael Sal Lari, sostiene que la indagatoria a la que se citó al titular de Austral Construcciones se basó en información aportada por la Unidad de Información Financiera (UIF) que el propio organismo reconoció fue obtenida de manera irregular, indicó la agencia DyN. Es por ello que, según el argumento de Báez, la acusación quedó huérfana de probanzas. 

"La convocatoria a prestar declaración no está basada en prueba. (El juez) no puede alegar siquiera la existencia de motivo bastante para sospechar", resume el escrito, de siete páginas y que se puede leer completo al final de la nota. 

Báez dijo que la indagatoria tiene como objetivo "disciplinar" su conducta frente a la causa que pesa en su contra y que la citación de todos sus hijos tiene ese sentido.

"No puedo descartar entonces que los llamados a prestar declaración indagatoria para toda mi familia (cada uno de mis hijos, sin distinciones relevantes en el curso y gobierno de las acciones), lejos de fundarse en el derecho de defensa... contenga un mensaje disciplinante hacia mi persona", señaló el empresario. 

En ese contexto, resaltó la "falta de precisión, claridad y referencia circunstanciada a los hechos sugeridos como probatoriamente verificados" en el llamado a indagatoria.
En términos similares a los que se defendieron ayer tres de sus hijos, Báez denunció que "la imputación no deriva de un acto de conocimiento realizado por el órgano jurisdiccional sino de un relato decisionista en el cual se reproduce una crónica de lo que habría sucedido, un relato periodístico esencialmente nutrido de delaciones, anónimos, tareas de inteligencia".

Todo ello redunda en "medidas de conocimiento, en su conjunto, extrañas a un proceso penal respetuoso de las garantías procesales más básicas". Y agregó que: "la Unidad de Información Financiera en cierta forma está admitiendo no haber seguido los carriles institucionales correspondientes", recordó Báez al pedir la nulidad del llamado a indagatoria.