Comenzando por su clásico de 2016 y 2017, en alusión al mejoramiento en el "segundo semestre" que nunca llegó, en marzo de este año lanzó "lo peor ya pasó" pero un par de meses después la inflación, el dólar, la desocupación y la pobreza lo pasaron por encima.

Luego en mayo, afirmó que "la turbulencia" estaba superada pero no tardó más que algunos días más en sellar un préstamo histórico con el FMI, endeudando al país como jamás sucedió.