Más allá del respeto por los resultados de las elecciones y de que este modelo que se viene fue el elegido por el voto popular, lo cierto es que Mariela Anchipi ofició de una especie de voz del pueblo al mostrarse preocupada por no haber escuchado una sola medida de contención.

Si se habló durante todo el día de recortes, ajuste y baja del gasto pero no del impacto que esto podría tener y cómo se intentará contener esas consecuencias.