Hacía mucho tiempo que no quedaban expuestas sobre la mesa, de manera tan concreta, las verdaderas "dos voces" de un conflicto. Por un lado,  el filósofo Juan José Sebreli junto con los conductores Marcelo Bonelli y Edgardo Alfano tratando de reducir- y reflotar-  la negociación del gobierno argentino con los buitres bajo el calificativo de "malvinización". Del otro, Eduardo Jozami politólogo, economista e integrante de Carta Abierta refutando todos los planteos.

Sebreli comenzó intentando encuadrar el último discurso de Cristina Kirchner en "la teoría de la conspiración que la vamos a encontrar en el manual más vulgar de sociología" o la "teoría del chivo expiatorio", donde desde el gobierno se habría "jugado" con las fórmulas Braden- Peron/ Griesa- Cristina apostando a una "malvinización".

Sin embargo, Jozami fue tajante en su respuesta: "Parece que Perón hubiera inventado a Braden, o que Cristina hubiera inventado a  Griesa. Y la verdad es que fue exactamente al revés".  Y agregó: "Uno no tiene que asombrarse que haya contradicciones con Estados Unidos (...) Siempre ha tenido una política de nominación con América Latina".  Y subrayó: "No se puede analizar este episodio como si la Presidenta le hubiese declarado la guerra a todo el mundo".

Pero el momento de más impacto del análisis de Sebreli fue cuando señaló: "Cristina no es Fidel Castro (...) es una insignificante personaje  de un país de muy tercer orden". A lo que Jozami contestó: " El país del tercer orden, me parece que no es tal y además es el nuestro. Yo soy respetuoso de las opiniones". Pero era evidente que Sebreli no midió sus palabras.

Jozami además destacó que la Argentina: " Es un país que en el mundo es respetado por sus derechos humanos" y agregó: "Estamos lejos de esa mirada desesperanzadora" que claramente desde ciertos grupos políticos y mediáticos quieren emponderar como si fuera la realidad.