Nelson Castro, reconocido por diagnosticar a distancia como cuando aseguró que Cristina sufría el sindrome de hubris, y un acérrimo opositor al gobierno no tuvo más alternativa que reconocer la importancia del anuncio del presidente en cuanto a la fabricación de la vacuna para toda latinoamérica.

Aunque le costó y lo dijo a regañadientes tuvo que reconocer la gran importancia no solo para el país sino, según sus propias palabras, "para la humanidad".

Obviamente Castro utilizó el resto de su salida para pegarle al gobierno por otros temas relacionados con el manejo de la pandemia, pero el reconocimiento del logro obtenido por el gobierno tapó sus críticas.