José Luis Espert siempre hizo gala de su cinismo, agresividad y deseo de confrontación. Desde la época en que era un economista que se paseaba por los programas de televisión dando su visión ultraliberal de la solución de los problemas del país, hasta ahora en su función de diputado oficialista.

Basta ver la cara que pone cuando habla con Luis Novaresio -alguna vez deberá explicar su sumisión a los libertarios después de haberlos atacado en campaña- sobre la satisfacción que le produce callar a la bancada kirchnerista.