Al principio parecía un testimonio más de una ciudadana que se había acercado a votar en el barrio de Palermo. 

Ahí fue cuando la señora empezó a decir que ya sabía quién iba a ganar y ante la obvia consulta del cronista la señora se desvió del tema y se limitó a señalar a “Massa y Mileicovsky”, tal como rebautizó a Javier Milei, como “judíos”.

De ahí en más y a pesar de los esfuerzos del periodista que estaba en el piso y que intentaba cortar la entrevista, cosa que pareció que el productor y el mismo cronista no querían hacer y dejaron a la señora seguir hablando y cada vez la empeoraba más hasta que alguien tomó la sana decisión de sacarla del aire.