Recalculando sobre sus propios pasos y tirando por la borda la doctrina libertaria y la escuela austríaca, el Gobierno sacó una resolución que vuelve atrás los aumentos dispuestos por las empresas de medicina privada, posibilitados por la vigencia del DNU del propio gobierno de Javier Milei.

Por eso Mariano Hamiton sostuvo que el error fue haber demorado cuatro meses en aceptar que la realidad es más compleja que la que marcan los libros y los dogmas ideológicos.

Y Pablo Duggan se permitió dudar acerca de que las empresas devuelvan lo cobrado de más.