Para mostrarse como una persona anticasta y repetir el latiguillo de que “es imposible una Argentina distinta con los mismos de siempre”, Carolina Píparo no demuestra con los hechos lo que dice en la campaña.

Y es que la candidata libertaria vive del Estado desde 2004, ha pasado por diferentes partidos e incluso tuvo más de un cargo a la vez.

Pero como si esto fuera poco, la diputada que junto a su marido atropelló a dos motociclistas y los abandonó a su suerte, también acomodó en el Estado a su cuñada, la esposa de su hermano.

Haz lo que yo digo pero no lo que yo hago debería ser el eslógan de campaña de Carolina Píparo.