La encuesta fue realizada por la consultora W. Sicchar entre el 16 y 19 de dicimebre, sobre un universo de 400 casos y a través de entrevistas telefónicas.

Los resultados arrojaron que "el 65 por ciento de los cordobeses asegura que desconfía de la Policía de Córdoba y prácticamente uno de cada tres considera como una opción válida armarse en defensa propia".

El 65% de los consultados desconfía de la Policía (la sumatoria es de un 28,7% que eligió el ítem "poca confianza" y un 36,2% que directamente optó por "ninguna” confianza. Sólo el 25,5% dice confiar “algo” en las fuerzas del orden.

En ese sentido, "casi la mitad de los entrevistados (47,7%) cree que hubo connivencia entre los saqueadores y los policías, mientras que sólo el 38,2% niega esa posibilidad".

A su vez, "el ranking de adjudicación de responsabilidades por los saqueos pone al tope al gobernador (33,6%), seguido por “la división de clases que hay en la sociedad” (20,1%).

Otro dato que surge del relevamiento es que "un 37,1 por ciento de los consultados admitió haber sido víctima de saqueos o por lo menos conocer a alguien que los sufrió, y también una percepción alarmante hacia el futuro: un 63,5% cree que esas situaciones se pueden volver a repetir".

"El temor que quedó instalado en la gente se expresa en un abrupto cambio en la valoración de la gestión provincial. Sólo uno de cada cuatro capitalinos tiene opinión favorable del desempeño de De la Sota. Del resto, 42% califica la gestión como “mala” y un 32% como “muy mala”. En este caso, el contraste con mediciones de octubre es notorio ya que daba 65% de aceptación y 33% de rechazo", analizó el sondeo.

Por el contrario, el conflicto parece no haber salpicado al intendente de la capital cordobesa, Ramón Mestre, "cuya gestión es considerada entre muy buena y buena por un 43% de los vecinos, mientras que 38% la evalúa como “mala” y 14% “muy mala”".