"Esto no lo hace nunca, pasá" le dijeron a un aterido Federico Pazo los agentes de seguridad de la vicepresidenta argentina que se compadecieron con el joven que se pasó horas esperando poder verla.

Pedro Rosemblat charló con Pazo, quien contó con lujo de detalle cómo fue que se produjo este hecho inesperado porque Cristina no suele recibir en su casa a ningún militante que se acerca a la puerta de su casa.

El domingo posterior a la final en el Maracaná será inolvidable para este joven militante que disfrutó el partido y al día siguiente tuvo su premio más esperado.