Con la denuncia de Alberto Nisman repleta de inconsistencias, la operación política del sector opositor se centró en el supuesto ‘exilio’ del periodista Damián Pachter, quien asegura haber escapado del país porque se sintió “amenazado” tras dar la noticia del fallecimiento del fiscal, información que de todos modos iba a conocerse.

Como muestra el informe de 678, los medios hegemónicos y algunos sectores políticos intentan mantener a flote esta maniobra a través de shows mediáticos diarios.

Para los empleados de TN, su colega “ha tenido que irse del país por miedo”, aunque en otros medios prefieren ser más cautos, y cuanto menos cuestionar el contexto en el que Pachter hizo la denuncia, ya que, como reveló el director del Buenos Aires Herald, Sebastián Lacunza, el periodista nunca mencionó en su medio estar sufriendo algún tipo de amenazas.

Además, el periodista no hizo ninguna acusación ante la Justicia, sino que solo se dedicó a hacer declaraciones ante los medios hegemónicos, sin citar pruebas contundentes.

En este sentido, y en otra muestra más de aprovechamiento político, cuando Sergio Massa se dio cuenta que no podía ir como querellante en la causa de la muerte de Nisman, apareció Mauricio D’Alessandro para presentar una denuncia contra Aerolíneas Argentinas por difundir información sobre la salida de Pachter del país.