Fue una reacción en cadena. Bastó que Facundo Manes mencionara las espías de Mauricio Macri a dirigentes políticos -incluso de su mismo espacio- para que desde los medios hegemónicos salieran a castigarlo en coro.

Tal vez no previó la encerrona cuando lo invitaron a TN -donde lo acribillaron a recriminaciones- pero supo salir con autoridad cuando Osvaldo Bazán lo apuntó por haberse quejado de los trolls que lo atacan en las redes sociales cuando dice algo que se aparta de la línea del PRO.