El periodista Federico Fahsbender aseguró que no estamos muy lejos de ver un símbolo del hambre y de la pobreza y, una vez más, los principales damnificados son los jubilados.

Y es que la clase pasiva es la que más consume medicamentos y cada vez resulta más difícil comprarlos, tanto que muchos se ven obligados a optar entre eso o comprar alimentos.