Airborne, la banda de hard rock originaria de Australia, estaba brindando un show en Canadá. Todo venía bien, hasta que ocurrió un accidente inesperado y en el momento menos pensado.

El cantante y guitarrista, Joel O´Keeffe, estaba haciendo un gran solo de guitarra. Y fue en su momento más álgido cuando se cayó del escenario.

Los asistentes se acercaron para socorrerlo, y pudieron ponerlo de pie. El músico, con un gran profesionalismo, continuó con el show.