Ocurrió en Gugulethu, en las afueras de la Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, donde un hombre fue detenido después de que la Policía local lo encontrara en el momento en que se comía el corazón de la nueva pareja de su exnovia.


La policía encontró el cadáver de la víctima, un hombre de 62 años, con marcas de cuchillo en su pecho y la cara mordida.


Los investigadores del caso sólo pudieron confirmar que el sospechoso de canibalismo es un hombre originario de Zimbabwe quien, consumido por los celos de ver a su mujer con otro hombre, decidió actuar contra quien robó el corazón de su amada.


Tanto los oficiales de Policía como los testigos -vecinos de la zona que llegaron a ver la asquerosa escena-, recibieron tratamiento psicológico para poder superar el episodio.