La policía detuvo a un auto de Google que se manejaba solo por la calle Mountain View, en California, Estados Unidos, por ir a 38 kilómetros por hora en una zona de 60, causando demoras en el tráfico.

"Mientras el oficial se acercaba al vehículo que avanzaba con lentitud, se dio cuenta de que era uno de los autos de Google", según informó el Departamento de Policía de Mountain View.

Si bien el auto se manejaba solo, en su interior había un pasajero, a quien la policía le pidió que aumente la velocidad en determinadas vías. Además, aprovecharon para informarle sobre el código 22400 que concierne a la ley de tránsito de California, que habla sobre las consecuencias legales de impedir o retrasar el tráfico.

Desde Google se declararon culpables por manejar a baja velocidad. "Le hemos puesto un tope a la velocidad de nuestros prototipos por seguridad: es de 40 kilómetros por hora", dice la publicación. "Queremos que se sientan amigables, más que unos vehículos que avanzan rápido y atemorizan a la gente en las calles de los vecindarios".