Un predicador en Sudáfrica obligó a los fieles de su congregación a pastar cual ovejas para "estar más cerca de Dios".

No contento con la absurda ceremonia, les tomó fotografías y las divulgó en su cuenta de Facebook, como un intento de sumar adeptos.

"Sí, comemos hierba y estamos orgullosos de ello. Ello demuestra que, sin el poder de Dios, no podemos hacer nada", dijo una creyente a los medios locales.