París se quedará definitivamente sin los "candados del amor"
La alcaldía de París ordenó la retirada definitiva de los "candados del amor" de las 37 barandillas del Pont des Arts (Puente de las Artes) por la amenaza que suponen para la estructura de la pasarela las toneladas de peso de esos recuerdos.
Las autoridades de la capital francesa, gobernada por la socialista Anne Hidalgo, quieren acabar con una tradición que, según indicaron en un comunicado, provoca "una degradación duradera del patrimonio y un riesgo para la seguridad de los visitantes, parisinos y turistas".
El puente, que atraviesa el río Sena a la altura del Museo del Louvre, inmortalizado en películas e incluso en la novela de Julio Cortázar "Rayuela", ya fue clausurado el año pasado porque una de los alambrados cedió ante la cantidad de candados.
En junio de 2014 se desplomó una baranda repleta de candados:
La retirada de los candados comenzará este próximo lunes y durará una semana, tras la cual el puente quedará cubierto por "una intervención artística temporal inédita, realizada por artistas internacionales", antes de que en otoño paneles transparentes sustituyan esas rejas.
La ciudad llevó a cabo en agosto una campaña de sensibilización para convencer a los visitantes de que abandonasen la práctica de simbolizar su amor colgando un candado del puente y lanzando la llave al agua del Sena. La alcaldía animó entonces a las parejas a reemplazar esos candados por "selfies" publicados en una página web específica, y al mismo tiempo puso a prueba durante seis meses la sustitución de los enrejados por paneles transparentes.
Esa segunda operación, según la alcaldía, demostró su pertinencia, razón por la cual se va a generalizar de forma definitiva para despedir una moda de origen aparentemente desconocido.
La tradición parece provenir de Europa del Este y haberse popularizado a través de la novela rosa "Ho voglia di te" (Tengo ganas de ti), del italiano Federico Moccia, cuyos personajes colocaban un cerrojo en el "Ponte Milvio" de Roma.