Si bien algunos entendidos ya conocían la sustancia, ésta era poco habitual en sudamérica. Se trata de un derivado de la cocaína denominado "cocaína negra" con un poder psicoactivo mucho mayor que la tradicional.

Esta droga fue encontrada en embalajes de una fruta tropical usada en Brasil, y estaba disimulada en ellos. Pero la policía percibió el contrabando y un ciudadano colombiano fue detenido por tráfico de drogas.