Luego de la tragedia de los Alpes franceses, donde se estrelló un avión de la compañía Germanwings que cubría la ruta entre Barcelona y Dusseldorf, y en el que fallecieron 150 personas, el papa Francisco envió sus condolencias a las familias de las víctimas.

El Sumo Pontífice envió una carta al obispo de Digne, Jean-Philippe Nault, en la que expresa que "se une al dolor de las familias y les manifiesta su cercanía".

"Rezo por el eterno descanso de los fallecidos, confiando en la misericordia de Dios para darles la bienvenida a su casa de paz y de luz", indica la misiva.

"El Santo Padre pide al Señor que proporcione a todos fuerza y consuelo y que invoque sobre ellos la abundancia de las bendiciones divinas", finaliza el mensaje.