El expresidente de Brasil, Lula da Silva, finalmente decidió bajarse de la candidatura presidencial con la que encabeza todas las encuestas pero que la Justicia rechazó tras la confirmación de la pena de cárcel por presunta corrupción.

El líder del Partido de los Trabajadores, que continúa detenido, será así reemplazado por quien oficiaba como su compañero de fórmula, el dirigente Fernando Haddad.

Las elecciones son el 7 de octubre próximo y Lula esperaba que el Tribunal Supremo acordara una apelación para tener así más tiempo para cambiar la boleta del PT luego de que la corte electoral le prohibiera participar y le diera diez días para eliminar su nombre de las boletas.

El anuncio de la candidatura presidencial de Haddad se realizará este martes en la sede de la Policía Federal de la ciudad sureña de Curitiba, donde el exmandatario fue encarcelado en abril.

Al día de hoy, Da Silva encabeza todas las encuestas que lo incluyen como candidato, dejando en un lejano segundo lugar al ultraderechista Jair Bolsonaro, quien por estas horas está internado tras haber recibido un cucillazo en un acto político.

A modo de despedida Lula escribió una carta al pueblo brasileño:

San Pablo se organiza para decir basta al gobierno de las élites, que siempre dio la espalda a los más pobres y a las demás regiones de nuestro Brasil gigante.

Nuestro rico potencial en las áreas de Educación, Ciencia, Tecnología y de todos los segmentos de la Cultura vuelve a ser diezmado por un gobierno federal ilegítimo y por sus partidarios estaduales.

Dije en mi despedida -el 7 de abril grabado como "Día de la Vergüenza"- que la lucha seguiría más fuerte a través de ustedes. Mi alegría es saber que mi corazón está presente esta noche en el Tuca, golpeando dentro del pecho de ustedes.

Mi voz es la voz de Luiz Marinho, de Ana Bock, de Suplicy y de Jilmar. De todos los que hablen o canten los himnos de la libertad, de la democracia, de la justicia y de la victoria.

Mi voz es la voz de Fernando Haddad y de todos los compañeros, en nuestra jornada intemporal para rescatar la dignidad nacional en todos los rincones del país.

Que este día marque el arranque para elegir a Luiz Marinho gobernador de San Pablo, permitiendo a nuestro estado caminar de la mano con todo el pueblo brasileño. Un pueblo que ya dejó claro cómo va a votar en las elecciones de octubre.

Vamos a arrancar para la victoria en estas cuatro semanas. Vamos a firmar esta noche ese compromiso de lucha. Compromiso en el nombre de la esperanza que renace. En nombre de Brasil que va a ser feliz de nuevo. Con la juventud siguiendo por delante, las mujeres, la población negra, la clase obrera, la Universidad, la Educación, la Ciencia y la Cultura.

La verdad vencerá.