El material fue grabado por un inmigrante sirio a través de un teléfono celular. La imagen muestra cómo se obliga a las personas a ponerse en fila contra una pared, al aire libre pese al frío invernal, para ser rociados con un producto contra la sarna, según el relato de la persona que lo grabó.

El diario romano La Repubblica recogió este miércoles el testimonio telefónico del supuesto autor del video, de nombre Ahmed, quien compara esa "desinfección" a la que fueron sometidos con una especie de túnel de lavado de coches.

"Reían, nos gritaban algo. Nos hicieron desnudarnos porque ellos no se acercaban, tenían miedo de la sarna. Descargaban agua muy fuerte sobre nuestros cuerpos. Nos dolía", le contó el hombre al diario.

El periódico asegura además que este inmigrante recibió amenazas por parte de algunos trabajadores de la cooperativa que ahora tienen temor a ser despedidos, ya que las imágenes dieron la vuelta al mundo avergonzando a los políticos italianos.

Las imágenes grabadas que muestran las complicadas condiciones de los inmigrantes en el centro de primera asistencia, que es gestionado por la cooperativa "Lampedusa, acogida", con una capacidad para 250 personas, pero en el que se hacinan actualmente casi 500.

No es además la primera vez que en este centro de la pequeña isla situada entre Túnez e Italia genera titulares negativos por su forma de funcionamiento. Este escándalo sucede dos meses después de la muerte de 366 personas en un naufragio frente a sus costas.

La Unión Europea tiene pendiente, desde 1999, gestionar los flujos de inmigración que llegan a territorio comunitario, aunque el asunto no se abordará hasta junio de 2014, luego de se hayan celebrado las elecciones al Parlamento Europeo, previstas para mayo próximo.

Sin embargo, el escándalo que se desató es tan grande, que la Comisión Europea pidió este miércoles a Italia que investigue las condiciones en que viven los inmigrantes indocumentados en Lampedusa, sobre lo que expresó su preocupación, y amenazó a ese país con un procedimiento de infracción si no cumple las reglas comunitarias al respecto.

"Las imágenes que vimos del centro de detención en Lampedusa son terribles e inaceptables", dijo la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmstrom, en un comunicado en el que pide a Roma una investigación sobre lo ocurrido y advierte sobre la posibilidad de sanciones.