Según indicó la oficina de prensa del hospital Mount Sinai, de Nueva York, "en las primeras horas de la mañana del lunes 4 de agosto un paciente con fiebre alta y síntomas gastrointestinales se presentó el departamento de urgencias del hospital Mount Sinaí de la Ciudad de Nueva York".

"El paciente había viajado recientemente a un país de África Occidental donde se había informado de Ébola. Ha sido colocado en estricto aislamiento y es objeto de estudios médicos para determinar las razones de sus síntomas", agrega el comunicado.

En tanto, otros dos ciudadanos estadounidenses, un médico y una misionera que trabajaban en Liberia, fueron repatriados a Estados Unidos para ser tratados tras constatarse que resultaron infectados con el virus.

Se trata del médico Kent Brantly y la misionera Nancy Writebol, que trabajaba con él, quienes fueron trasladados este martes en el mismo avión sanitario desde Liberia.

Desde el 1 de agosto, cuando se declaró el brote, más de 1.600 personas resultaron infectadas por el Ébola en distintas regiones africanas, 887 de las cuales ya murieron; los países más afectados son Sierra Leona, Guinea y Liberia.