A seis meses del episodio psiquiátrico que le cambió la vida, Matías Alé contó con detalle las cosas que imaginaba en los momentos previos y durante el brote psicótico. Luego de eso quedó internado en una clínica especializada durante un mes. 

La noche del 30 de octubre del 2015, Alé prendió la televisión y se quedó mirando "David y Goliat", un programa de entrevistas conducido por María Laura Santillán en TN, donde víctimas y sobrevivientes de diversas situaciones cuentan sus historias.

"En plena travesía, dos tipos se encontraron con un banco de nubes y sin instrumentos suficientes para volar a ciegas. Eso en aviación se llama 'perder la consciencia situacional'. Si te pasa, la única opción es volar bajito y asegurarte de no chocar contra ninguna montaña. Cuando vi eso pensé que Dios me había dado una señal sobre la clase de camino que se me venía. Me estaba diciendo que yo también debía volar bajo, callado y sin llamar la atención. Sentía que venía a salvar el mundo y que mi mujer era mi socia en eso y que tenía que protegerla. Durante todo el programa yo tomaba nota de lo que tenía que hacer los próximos meses", afirmó.

El 3 de noviembre, cuatro días después, Alé tuvo que ser internado. "Veía el noticiero y si decían que estaba congestionada la autopista, yo entendía que ese era un mensaje que me decía dónde yo iba a estar seguro y dónde no. Las publicidades me decían qué productos tenía que consumir para estar fuerte".

Y reveló: "No dormía, solo dos o tres horas y me despertaba porque sentía que tenía que estar alerta para cuidar a María".

En Formosa, hubo un antecedente, él viajó para animar una fiesta de 15 años, la homenajeada se llamada Sabrina. Según contó, durante la fiesta separaba a los invitados entre quienes podían "de un lado estaban los que podían ser cómplices y llevarle algún mensaje, del otro los que había que vigilar".


"Cuando al día siguiente un cartel que decía 'Sabrina' se cayó, creía que toda esa fiesta se había montado para darme la bienvenida a mí, que había tomado conciencia de cuál era mi misión en la Tierra: estaba convencido de que mi misión era vivir en Carlos Paz y construir un arca, me puse una bata y creí que me llamaba Noé", indicó el actor.