En medio de un llanto desconsolado Gisela Bernal se volvió a defender de las acusaciones de su marido, el productor Ariel Diwan, luego de que el empresario teatral revelara que el hijo de ambos no lleva su sangre.

La mujer repitió que la situación que se conoció publicamente la semana pasada, era un tema hablado y consensuado en el seno familiar y agregó: "tengo grabaciones en las que (Diwan) me extorsionaba con la casa".