Granata no tiene pelos en la lengua y se sabe que le gusta dar su opinión de todo. Esta vez su victima fue Jimena Barón y su mediática reconciliación con Daniel Osvaldo luego de varias denuncias e idas y vueltas por estudios de abogados.

Amalia parece no suscribir a eso de que "el amor es mas fuerte" y se despachó con todo lo que pensaba. ¿Y por casa como andamos?